Punto de com a

miércoles, noviembre 12, 2003

El gris obscuro ha vencido al anaranjado de la tarde y las teclas de la computadora, impunes durante el día, sucumben al caliente tacto de mis dedos que las tocan con puntas llenas de deseo insaciado. Las manos sudan y me siento como imagino que se sentiría un personaje de película de Fassbinder que llega a un burdel ardiendo en deseo. Mejor me imagino a mí mismo como un doctor que, al atender como ginecólogo en un burdel, acepta con curiosidad de observador pasivo una invitación de la madame del lupanar a una noche orgiástica en la que una muchaha virgen vestida de novia será rifada entre cerdos famélicos de hambre humana que encuentra en la propia carne el alimento a unas lágrimas vestidas de placer.
Me pregunto cuál de las 27 letras del teclado será esa muchaca virgen vestida de novia, y me pregunto también cuál de mis dedos será el cerdo que clavará su punta en una inocencia que ya no será más. Sospecho que la que no ha sido tocada hasta ahora es la W, pienso en la palabra woman y mientras sigo escribiendo me doy cuenta que, saciado el deseo, la escritura se apaga.

martes, noviembre 11, 2003

Lie lie lie lie liar you lie
lie lie lie lie lie tell me why
tell me why why d'you have to lie
Should've realised that you
should've told the truth
should've realised you know what I'll do

You're in SUSPENSION you're a LIAR

Now I wanna know know I wanna known why
you never look me in the face
Broke a confidence just to please your ego
should've realised you know what I know

I know where you go everybody you know
I know everything that you do or say
so when you tell lies I always be in your way
I'm nobody's fool and I know all cos I know
what I know

Lie lie lie liar you lie lie lie lie
I think you're funny you're funny ha ha
I don't need it don't need your blah blah
should've realised I know what you are

you're in SUSPENSION you're a LIAR
you're a LIAR
you're a LIE
LIE LIE LIE

Según cantan los SeX PiStoLs, aún sin que no muchos les hagan caso. Ay, qué sería de la humanidad si no existieran transgresores por el estilo que denunciaron algo que seguramente a todos nos tienen hasta la madre. Una mentira lleva a otras y entonces llegará un momento en que no sabremos nada de cierto. Hoy, estoy seguro, existe la sospecha de que todo es una mentira.

La mentira entonces es un asunto cotidiano.

Cómo queremos confiar en nosotros mismos si sabemos que la publicidad, en muchos casos, es un engaño para inducir la compra de un producto. ¿No será que lo que realmente es necesario y lo que realmente vende por si solo no necesita de ninguna publicidad?

Herencia podrida de Maquiavelo y de Hobbes


Mientras permanezca la desconfianza permanecerá también latente la amenaza del maquiavelo que todos llevamos dentro.

Desconfianza fundada en el miedo no sólo a uno mismo sino a los demás. Recordemos que Hobbes, un miedoso de primera, inventó a un monstruo para que lo cuidara de sí mismo arguyendo que el hombre era el lobo del hombre. La pregunta es si ¿realmente el hombre es el lobo del hombre o si nadamás los hombres lo creyeron porque les pareció posible que lo fuera? ¿tememos a los demás o tememos a nosotros mismos? ¿Porqué el oráculo de Delfos decía "conócete a tí mismo"? ¿No sería porque es la única manera de no temerse? Generalmente se teme a lo desconocido y si no conoces bien al otro, pues la alternativa más fácil es temerle. ¿Nos conocemos a nosotros mismos? O mejor aún ¿te conoces a tí mismo?

El hommo homini lupus es un supuesto que posiblemente encuentra fundamento en el dilema del prisionero famoso del equilibrio de Nash famoso de la teoría de juegos famosa. En éste dilema famoso dos delincuentes son arrestados por un crimen que, en connivencia, cometieron; el captor los coloca en celdas diferentes y plantea a cada uno tres posibilidades por demás interesantes con un resultado aún más interesante y divertido: 1) si confiesas y te declaras culpable del crimen que sabemos cometiste, tan sólo te daremos 5 años de cárcel; 2) si te declaras no culpable y tu compañero confiesa, te daremos 10 años de cárcel; y 3) si no confiesa ninguno entonces hoy mismo pueden retirarse libres de cargos a sus vidas. El curioso resultado de esto es que ambos confesarán para obtener sólo 5 años de cárcel en lugar de los 10 que supone el no confiar plenamente en el cómplice. Algo como eso es el equilibrio de Nash. Posible por la información imperfecta. Posible porque el interés supuestamente tiene pies.
¿Será posible demostrar lo contrario y realmente apelar a la compasión, es decir del dar sin esperar nada a cambio? ¿Qué pasaría si se pensara en dos prisioneros inmunes al dilema, dos prisioneros que verdaderamente confían en sí mismos y entre sí? El dilema estaría superado y ambos optarían por la opción "2", que es la que los deja libres a ambos, entonces la autoridad tendría que pensar en nuevos métodos para desprender confesiones a los culpables, además de que aprendería la lección de que contra la confianza no hay nada qué hacer. La lección de la confianza podría llevarse entonces a las instituciones y, poco a poco nos iríamos acostumbrando a confiar los unos en los otros, poco a poco los que cometen crímenes serían menos porque siempre alguien confío en ellos y ellos confiaron así que no hubo necesidad de infringir.

Ya todo ha sido dicho en distintos tiempos. No hay nada nuevo bajo el sol porque todos sabemos de lo que somos capaces y de lo que no. Pala, por ejemplo, la Isla que imaginó Aldous Huxley, es posible si fue posible en la imaginación. Somos pensamiento.

El problema, que nos lleva de regreso a la desconfianza, es que hoy por hoy siguen abundando los distopistas en potencia que se mofan de lo que consideran utópico, por falta de confianza dudan y con esa duda perpetúan el antagonismo del mundo que se repite ad nauseam. Pero qué bien que existan tanto el día como la noche y que exista también un Ying y un Yang. La misión quizás está en buscar y en encontrar un equilibrio, no en intentar que prive uno negando al otro como, según hemos visto en la historia y en la imaginación, suelen intentar hacer los distopistas más famosos de los que tenemos memoria, léanse Hitler, Stalin, Pinochet, Osama Bin Laden y el mismísimo George w. Bush.

La cuestión es que, al parecer, mientras se siga pensando en que hay un enemigo lobesno al cual aplastar nos seguiremos aplastando a nosotros mismos.

lunes, noviembre 03, 2003

¿Cómo se deshace lo que nunca estuvo hecho?

Trabajar en la administración pública es algo de lo que muchos deberían de prescindir. Me pregunto si yo me encuentro entre ellos.

Algún Diagnóstico

¿En dónde estoy? Al parecer perdido en alguna parte de mi vida cotidiana. Y si bien me veo todos los días en el espejo al afeitarme, lavarme los dientes o simplemente peinarme, no sé quién soy en realidad, por lo tanto no sé dónde estoy. Al parecer he olvidado mi vocación y vago por el mundo en busca de algo que ignoro por completo. Esto es autobiográfico, lo sé. Dirán que porqué escribo sobre mí mismo cuando existen tantas cosas sobre las cuales escribir. Cierto, pero yo diré que es necesario escribir sobre uno mismo para conocerse un poco, claro que todos los que hacen o pretenden hacer literatura, escriban sobre sí mismos o no, buscan en el fondo algo que se ha perdido o que jamás se ha tenido. La literatura como búsqueda perpetua de uno mismo, de sí mismo o de lo ajeno, de lo que viene de otros y no se puede vivir mas que a través de una representación escrita.

¿De dónde vengo? Pues eso es algo que ignoro por completo. Me han dicho que vengo de las Pléyades, un grupo de estrellas que se encuentra en la constelación de Tauro. Nací de mis padres y sé que no quiero cargar con sus pecados. Vengo también de mis intereses, de mis miedos y mis deseos.

¿Quién soy? Yo soy Yo. Y Yo no soy tú. Soy uno que respira y que, amén de presionar las teclas que se convierten en estas palabras, quiere vivir intensamente haciendo lo que le haga feliz y siendo el que realmente es. ¿Es eso posible en una sociedad como la que habitamos?

¿A dónde voy? Como decían aquellos que poblaban antes en estas tierras mexicanas: a bien morir, a su debido tiempo, ni antes ni después, sino en el momento justo para después ir más lejos o más cerca a otro cuerpo, a otra vida, con otras misiones y otras pasiones, con otro yo que no dejará de ser yo mismo. Es como si todos viajáramos por las vidas, presos en este mundo de superación de obstáculos. Universo divertido que nos permite aprender con manzanas. Quizás por eso la manzana de Eva, porque desde que entramos a la ciencia, aprendemos con manzanas. Pensar que se está atrapado en el mundo hasta pagar todo el karma.

Sí, soy un escritor. Soy un escritor que escribe sobre lo que le viene en gana, en ocasiones sin método aparente, pero siempre con alguna intención, así sea esta evadir la locura metiéndome a los laberintos de las letras.

En un mundo en el que parece que las personas se han olvidado de leer, la aportación literaria parece prometer poco. Sin embargo la esperanza muere al último y siempre se ha sabido que el único fin era encontrar algo que se creía perdido. El recuento de palabras que parecen no llevar a ningún lado, el placer de vivir las letras. En una palabra: escribir.

Me pregunto porqué se suele asociar a la escritura con el tabaco. Porqué la imagen del escritor con la que cargamos la memoria viene con cigarrillo en mano.

Porqué mis primeros escritos son autobiográficos, porqué pretenden atender los cuestionamientos que me aquejan. Quizás sea un truco de la mente para ponerme a escribir, aunque sea desde mi propia experiencia. Ya me hacía falta, sí que ya me hacía falta. Ahora entonces se podría decir que lo que he de buscar son historias. Ya tengo algunas y sé que al interior de mi cabeza se guardan historias, muchas historias que pronto saldrán solas.

¿Realmente quiero ser escritor?

¿Qué es hoy ser escritor?

¿Qué más se me ocurre que quiero hacer en esta vida en la que me encuentro?

¿Cómo quiero convertir mi presente en pasado?

Estas hojas parecen propias de un diario, pero me parece que siempre y cuando se preste a fomentar la fluidez, cumple un propósito valioso.

Llevar quizás un cuaderno de notas para anotar en él ideas para ensayos. Otra para novelas. Vuelvo a preguntar: ¿realmente quiero ser escritor? Esto es algo que necesito o algo que deseo.

Entonces

¿Qué es lo que realmente necesito? De entrada se me ocurre decir que lo que realmente necesito es vivir y hacer, dejar de preocuparme por estas preguntas que quizás tan sólo contribuyen al estancamiento.

Recuerdo que John Steinbeck decía que la misión del escritor es denunciar los desatinos de la sociedad, esto es una paráfrasis incompleta que quizás pierde la esencia de lo que realmente dijo el escritor de la Perla y las uvas de la ira, pero igual esa es la parte que quería rescatar.

Supongo que sí tengo mucho que denunciar, sólo que ahora, en un momento histórico en el que las personas prestan mayor atención a la televisión y ya somos pocos los que leemos libros escritos, pues me asalta la duda que supongo asalta, o ha asaltado, a todos los escritores del mundo: ¿vale la pena? Supongo que si retomamos las palabras anotadas al principio de este caótico post, valdrá la pena para saber qué es lo que busco en la literatura, quizás ahí me encuentre a mí mismo, sepa quién soy, de dónde vengo y a dónde voy.